Nuevas tarifas de energía en Colombia: ¿un respiro para los hogares?

 

El Gobierno Nacional ha implementado un nuevo sistema de precios de energía que busca aliviar la carga financiera para los usuarios, particularmente en el Caribe colombiano, donde las tarifas han sido históricamente altas. La medida, que se basa en una resolución de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg), establece dos precios diferenciados para la energía generada en el país.

El primer precio, mucho más bajo, se aplicará a las plantas que generan energía a través de carbón y fuentes renovables. Este precio tope estará fijado en $359 kWh, significativamente menor que el precio de escasez anterior, que rondaba los $945 kWh. El segundo precio, el tradicional precio de escasez, solo se aplicará a tecnologías más costosas, como las plantas que operan con gas importado o combustibles líquidos, cuyos precios están vinculados a los mercados internacionales.

Esta diferenciación tiene como objetivo garantizar que la energía producida a costos bajos y competitivos se venda a un precio eficiente, mientras que las tecnologías más costosas solo se utilizan cuando es necesario, como en períodos de sequía o por restricciones de la red.

El Ministerio de Minas y Energía asegura que esta medida tendrá un impacto inmediato en las tarifas de energía para los colombianos. «El mercado de la energía es ahora más justo con los usuarios, quienes llevan años exigiendo este tipo de acciones», afirmó el ministro de Energía, Omar Andrés Camacho.

El nuevo sistema de precios también busca mejorar la eficiencia del mercado eléctrico colombiano, ya que los precios en bolsa, donde se compra alrededor del 20% de la energía del país, estaban determinados por las plantas menos competitivas, lo que hacía que la energía hídrica y solar se pagara a precios hasta 10 veces más altos de su costo real de producción.

Sin embargo, algunos expertos advierten que la deuda de la opción tarifaria no se ha solucionado y el Estado aún debe subsidios a las empresas, lo que podría generar problemas de caja para la compra de energía. Además, aún no está claro cómo se implementarán las fuentes no convencionales de energía en este nuevo sistema.

El gobierno colombiano espera que este nuevo sistema de precios de energía contribuya a la sostenibilidad del sector energético y a la reducción de la carga financiera para los usuarios.