Un matrimonio que se convirtió en tragedia

 

Por Yanitza Fontalvo Diaz

 

 

En dolor y confusión terminó la boda de Ebed Shaday Calderón Rosales y Camilo Andrade, magister en Educación Física, el matrimonio era celebrado en la Casa Campo los Riascos en el sector de la Feria Ganadera.

Hacia las ocho de la noche bajo un torrencial aguacero los novios y por lo menos 120 invitados se resguardaron bajo techo para continuar la celebración. El sueño anhelado de la joven que había perdido a sus padres hacia dos años atrás los pastores Eduardo Calderón y Yaneth Rosales muy queridos en la ciudad por liderar la Iglesia Cristo vive en mi.

Era el día más feliz de su vida, en las redes habían circulado fotos con sus damas de honor con batas rojas mientras que la novia estaba de blanco, todo era perfecto.

Pero pasó lo inesperado la estructura del techo una construcción que recientemente había sido entregada de acuerdo a declaraciones de un miembro del Cuerpo de Bomberos colapsó.
“En un principio empezó a llover escombros cuando todos advirtieron salieron corriendo y de inmediato el techo se desplomó desde el medio hacia afuera. Ahí empezó la tragedia”, expresó un testigo.

Todos empezaron a llegar y no tardó mucho en llegar los organismos de socorro, Cuerpo de Bomberos, Defensa Civil, Cruz Roja, Ejercito se hicieron presentes.

Alrededor de 25 personas que se encontraban heridas fueron remitidas a diferentes clínicas de Valledupar, una mujer de de 67 años e a UCI.
Dos personas que no lograron salir de los escombros fueron halladas sin vidas. Se trata de Naileth Guerra una de las damas de honor, de 22 años, quien servía en la Iglesia Adoremos como baterista “todos la querían era muy graciosa con sus cabellos rizados, duele mucho su muerte”, expresó su amiga Stefhanny Rojas.
La otra persona fallecida es la menor de 13 años Shaday Valera hija de pastores oriundos de Barranquilla.

“En el mundo tendreis aflicciones pero confiad yo he vencido al mundo, Dios dará consuelo a quienes han pedido sus seres queridos ya están con Cristo y va a sacar adelante a los lesionados seguimos orando por ellos, Dios metió su mano, porque pudo ser peor”, manifestó una pastora de la ciudad.