El Congreso de la República aprobó declarar Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación ‘La Mudanza Folclórica’ del Festival de la Paletilla en Becerril, Cesar
“El patrimonio cultural de la nación está constituido por todos los bienes materiales, las manifestaciones inmateriales, los productos y las representaciones de la cultura que son expresión de la nacionalidad colombiana…así como, los bienes materiales de naturaleza mueble e inmueble a los que se les atribuye, entre otros, especial interés histórico artístico”._
Una buena noticia fue entregada por el Congreso de la República a los cesarenses, luego de aprobar en segundo debate, el proyecto de ley número 325 de 2023 por el Senado y 122 de 2022 por la Cámara, se declara Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación la Mudanza Folclórica, actividad que nace y se desarrolla en el marco del Festival de la Paletilla en el municipio de Becerril, Cesar.
Esta incitativa de ley fue radicada ante la secretaría general de la Cámara de Representantes por Honorable Representante José Eliécer Salazar López, el 09 de
agosto de 2022. Luego de surtido el trámite legislativo, ahora solo falta la sanción por parte del Presidente de la República, Gustavo Petro.
Con este acontecimiento se promueve la conservación, fortalecimiento y promoción de dicha expresión cultural, a través del apoyo material y financiero por parte del Gobierno Nacional, así quedó establecido en el articulado decretado:
• Exaltar como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación, la expresión y actividad cultural ‘La Mudanza’.
• Autorizar al Gobierno Nacional a través del Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes, a acompañar en la inclusión de la expresión y actividad cultural ‘La Mudanza’, en la Lista Representativa de Patrimonio Cultural Inmaterial y se elabore o modifique el Plan Especial de Salvaguarda correspondiente.
• La Gobernación del Cesar y/o el Municipio de Becerril prestarán el apoyo técnico para la conservación e impulso de las manifestaciones del patrimonio cultural inmaterial de la región.
• Autorizar al Gobierno Nacional, a través del Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes, a acompañar a la organización promotora en la inclusión de la Plaza Rozo Machado, como bien de interés cultural del ámbito nacional.
• Autorizar al Gobierno nacional para que se incorpore dentro del presupuesto general de la Nación y/o se impulse la cofinanciación a fin de dar cumplimiento a las disposiciones previstas en esta ley.
Historia de ‘La Mudanza’:
La Mudanza es una actividad recreativa cultural con la tradición de realizar un recorrido con la estructura de la casa de madera y techo con palma amarga que sale de la entrada de esta localidad hasta la casa indígena de los Yukpas, ubicada en la zona urbana, con el fin de simular el traslado y el asentamiento de la familia.
La manifestación cultural de La Mudanza integra el patrimonio inmaterial de la cosmovisión de la vivienda, además constituye un vínculo con el patrimonio material, como una interacción de ambas dimensiones.
Expresando así́ las tradicionales costumbres de las viviendas en los inicios de la comunidad becerrilera.
De esta manera, ‘La Mudanza’ propicia el espacio para destacar a gestores y creadores culturales:
Mudanceros, horqueteros y caleros, estos roles desempeñados por hombres y mujeres, donde el público participa alegremente con un ambiente de fiesta con cantos, bailes, bebidas y comidas tradicionales como lo es el vino de uvita de lata, el cafongo, viuda de pescado y la chicha de maíz, añadiendo elementos propios de jolgorio.
La vieja tradición de la Mudanza consiste en:
Sobre el mediodía, los habitantes de Becerril levantan el techo de palma que está en el suelo y lo alzan por encima de los hombros.
Al mando está un coleador (él es uno de los 60 mudanceros), encargado de jalar la
cabuya y dar la orden de partida, gritando: ¡Güepajeeee…!, y así́ arranca la tradicional Mudanza, el acto principal del Festival de la Paletilla.
La Balastrera es el punto de partida del singular desfile hacia la población. En un trayecto de tres kilómetros, los participantes cargan la casa de palma sobre sus hombros. A pesar del cansancio, hay derroche de alegría, y el sudor brota a chorros debido al sol inclemente.
La casa está rodeada por una multitud que baila y danza con la música de las bandas papayeras.