A través de sus redes sociales y comunicados de prensa, los artistas vallenatos lamentan la triste partida del maestro Adolfo Pacheco Anillo.
Iván Villazón: Dios acoja en su santo reino a este gran maestro de la canción vallenata que nos deja un valioso legado con su bella inspiración. Nos duele la triste partida del Maestro Adolfo Pacheco Anillo.
*Jorge Celedón*: se nos va un juglar vallenato. El maestro Adolfo Pacheco brilló con sus sentidas canciones y ese talento que Dios le dio para cantarle al mundo vallenato, con su naturaleza, vivencias y anécdotas. Siempre lo recordaremos.
*Fabián Corrales*: el vallenato ha perdido a un insigne maestro de la composición. Adolfo Pacheco lo recuerdo con su sombrero, su amabilidad, su sonrisa y ese tesoro musical de sus bellas canciones. Paz en su tumba.
*Diego Daza*: fiel admirador de la obra maestra de Adolfo Pacheco, que con sus canciones nos deja un importante legado musical a la nueva generación del vallenato. Sus obras tienen una magia de letra y melodía. Adolfo Pacheco, siempre grande.
*Poncho Zuleta*
«Se ha ido un hombre con quien la cultura Colombiana estará en deuda eternamente. »
«Vuela alto mi querido amigo y maestro #AdolfoPacheco 🙏🏼»
*Gustavo Gutiérrez*
Me entristece despertarme con esta noticia, se ha ido mi gran amigo y colega adolfo pacheco. Que en paz descanse y Que Dios lo tenga en su gloria.
*Festival Vallenato*
De luto la música vallenata por el fallecimiento del juglar Adolfo Pacheco Anillo. Él con su talento y creatividad nutrió con bellas canciones el folclor y lo meció con orgullo en una hamaca grande. Precisamente, en el año 2005 fue declarado Rey Vitalicio en el Festival de la Leyenda Vallenata donde se exaltó su nombre y abundante obra musical.
La Fundación Festival de la Leyenda Vallenata presenta las condolencias a sus familiares, paisanos y amigos. Paz en su tumba.
*Rafa Manjarrez*
Con la partida de mi Mtro. Adolfo Pacheco, se va un coloso creador irremplazable de nuestra música nacional, que con su prolífica obra se ganó el cariño y respeto de todos los Colombianos. Por: Paul Bolaño Saurith