La ganadería sostenible es una apuesta del sector que apunta a la promoción, posicionamiento, desarrollo, transformación social y económica, mediante la implementación de prácticas amigables al medio ambiente que promuevan una mejora en el bienestar y la calidad de vida de todos los colombianos.
Sin embargo, la ganadería es una práctica considerada negativa para el medio ambiente, consumiendo gran parte de los recursos naturales, lo que, para Manuel Gómez Vivas, docente del programa virtual de Tecnología de Producción de Ganadería Sostenible de Areandina Sede Valledupar, es importante tener en cuenta los retos y oportunidades en el país.
En línea con los ODS
Los objetivos de desarrollo sostenible están diseñados para ser un plan viable, los 17 ODS y sus 169 metas son la hoja de ruta creadas por la Asamblea General de las Naciones Unidas, por consiguiente y con base a estas ODS, el docente Gómez manifiesta que “los ODS son una oportunidad para que las empresas amplíen la responsabilidad social empresarial porque constituyen una agenda global que busca afrontar y solucionar los graves problemas que en la actualidad enfrenta el planeta.”
De los 17 objetivos, seis de ellos recibieron significativamente más prioridad para la ganadería actual, desde todas las perspectivas: Fin de la pobreza, Hambre cero, Acción por el clima, Vida terrestre, Consumo y producción responsables y Alianzas para los objetivos.
“En estos sistemas, la principal contribución está en mejorar la productividad de una forma amigable con el ambiente, disminuir la dependencia de insumos externos, apropiación de la tecnología y material genético, que, con la mejora en los ingresos, la disminución de costos de producción, favorece la rentabilidad social, ambiental y económica”, explica el académico.
Tendencias para bienestar animal y cuidado del ambiente
Para el experto Gómez, “es importante estar actualizado con estrategias educativas, tecnológicas, políticas y económicas que minimicen los impactos, se recuperen las zonas afectadas y hacer más productiva la actividad para los ganaderos”, por lo que llevar un avance en dimensiones de sostenibilidad en la ganadería, el docente recuerda:
- Un adecuado suministro de alimento para el ganador durante todo el año, incluyendo en las épocas secas.
- Incrementar la captura de carbono en las coberturas de sistemas silvopastoriles y en áreas de conservación y restauración.
- Promover prestación de servicios ambientales como el incremento de la biodiversidad.
- Gestionar el conocimiento desde la academia y los centros de investigación para la promoción del talento humano desde los aspectos de formación de técnicos y tecnólogos.
Aprovechamiento de herramientas 4.0
Las nuevas tecnologías han abierto una ventana para el acceso a un mayor conocimiento. Las herramientas disponibles para el sector ganadero y su avance a la sostenibilidad van desde diversas apps de administración de fincas, hasta mediciones satelitales de área en los predios y la biomasa forrajera en tiempo real.
“En temas de comercialización de insumos, bienes y servicios, mercadeo por subastas como EUROVACAS o ALMAGAN, es importante la comunicación fluida, debido a que permite acceder a programas de capacitación, mejora del talento humano y crecimiento de conocimiento participativo. Además, es significativo acercar a las comunidades ganaderas los aplicativos contables, calculadoras de carbono y biodiversidad, que es otra ventaja de las tecnologías 4G”, agrega el experto Gómez.
Tecnología al servicio de los procesos ganaderos.
El progreso y la transformación del sector ganadero ofrecen oportunidades económicas y de reducción de la pobreza, pero el rápido ritmo del cambio podría marginar los pequeños ganaderos. Para el académico Gómez, “deben abordarse los posibles riesgos que el desarrollo de la ganadería puede representar para el medioambiente y la salud humana con vistas a garantizar la sostenibilidad del sector”.
En el caso colombiano, debido a la variedad de suelos y climas, la ganadería siempre ha sido una de las labores más importantes y desarrolladas en el sector rural. “Esta ha sido una actividad de gran tradición en diferentes regiones del territorio nacional, papel que cumplen las más de 620.000 familias con un alto porcentaje de pequeños productores dedicados a esta actividad que están repartidas en el del país”, afirma el experto, quien además indica los principales beneficios de un modelo integral en el sector ganadero:
- Ambiente: se identifican los diferentes impactos ambientales generados por la actividad y cómo la ganadería ecológica reduce su incidencia en cada uno de estos.
- Suelo: controla los accesos y elimina los obstáculos a la movilidad en pastos comunales, utilizando métodos de conservación del suelo y el silvopastoreo, recicla los nutrientes incorporándolos de nuevo al suelo como compost o abonos orgánicos.
- Atmósfera y clima: incrementa la eficiencia de la producción ganadera y de la agricultura forrajera. Mejora la dieta de los animales y reduce la fermentación intestinal.
- Agua: con el manejo efectivo, mejora la eficacia de los sistemas de riego.
- Biodiversidad: no permite la tala de árboles, prácticas de conservación y conectividad de los paisajes y manejo adecuado de cuencas hídricas y ecosistemas estratégicos.
- Social: generación de empleos adicionales, el trato al ser humano y su integridad, ambiente laboral con mejores condiciones, calidad de vida y bienestar a las familias productoras.