Sigue su calvario
Los funcionarios del Instituto de Rehabilitación y Educación Especial, Idreec, siguen esperando la misericordia de los dirigentes del Cesar. Esta entidad de la que se sintieron orgullosos era una de las más queridas de los cesarenses, con su misión de rehabilitar personas con problemas de discapacidad cumplía una importante labor social. Sin embrago, más de 30 meses sin salario, después de darle su vida a una institución que la negligencia tiene en Unidad de Cuidados Intensivos ad portas de una intervencion, la Superintendencia de Salud, el Ministerio y la Gobernación del Cesar tiene la responsabilidad no sólo de rescatar un ente que presta un servicio tan fundamental, sino de hacer valer el trabajo de muchas familias que dependen laboralmente del Idreec.