Asesinatos por violencia política en Colombia aumentaron en octubre

Según un informe entregado por el Centro de Investigación y Estudios Sobre Conflictos Armados, Violencia Armada y Desarrollo (Cerac), en octubre de este 2020 aumentó en un 80 % el número de crímenes de violencia política en el país.

Mientras que en el 2019 se registraban 10 asesinatos, en la presente anualidad fueron 18 los casos ocurridos en Colombia de acuerdo al monitoreo realizado en los 31 días de octubre.

En dicho ejercicio se detectó la persistencia en el alto riesgo de seguridad que afecta a los defensores de Derechos Humanos y los líderes sociales en Colombia.

La entidad precisó que, en total, durante el pasado mes sucedieron 26 hechos de violencia política que dejaron por víctimas mortales a 18 personas, a otras cinco con lesiones, una secuestra y 29 más amenazadas.

El mismo informe señala que los afectados, en su mayoría, fueron los dirigentes de las juntas de acción comunal y activistas políticos regionales.

LAS CIFRAS 

De acuerdo con el Centro de Investigación, en promedio se han registrado 16 muertes mensuales en lo corrido del año, lo que se traduce en un aumento del 45 % en la cifra de homicidios en relación a las del 2019, donde la media era de 11 muertes por mes.

“El promedio mensual de muertes de 2020 se reduce 11%, cuando lo comparamos con el promedio mensual de muertes de violencia política en el mismo periodo de 2018 (18 muertes)”, señaló el estudio.

Los departamentos con mayor número de casos en octubre fueron Antioquia, Cauca, Cundinamarca, Chocó, Huila, Nariño y Norte de Santander.

CASOS DESTACADOS 

 

– Carlos Navia, integrante del movimiento social Coordinador Nacional Agrario (CNA) y fundador de la Asociación de Juntas de Acción Comunal de Argelia, Cauca, ultimado en zona rural de ese municipio.

– Juana María Perea Plata, activista ambiental y empresaria asesinada con arma de fuego en zona rural de Nuquí (Chocó), donde según el Cerac, desde 2018 se registra presencia violenta del ELN y del Clan del Golfo.

– Eduardo Alarcón, dirigente campesino y exconcejal de Campoalegre (Huila) ultimado en zona rural de ese municipio.

– Fernando Tróchez, integrante de una asociación campesina afiliada a la Federación Nacional Sindical Unitaria Agropecuaria, quien fue asesinado con arma de fuego en zona rural de Corinto (Cauca).

– Edith Johana Barbosa, dirigente comunitaria del corregimiento La Gabarra en zona rural de Tibú (Norte de Santander), quien murió tras ser atacada a disparos.