Los temas empresariales y agrícolas fueron un aspecto central del proceso de reparación colectiva que se cerró recientemente con la comunidad Chimila en Cesar, residente en 19 veredas del municipio de El Copey, según información de la Unidad para las Víctimas.
La comunidad de ese corregimiento cesarense recibió de manera gradual todas las medidas de restitución, satisfacción, rehabilitación y garantías de no repetición, contempladas en el Plan Integral de Reparación Colectiva.
A la gente de Chimila se le apoyó en la reconstrucción de su tejido social, haciendo énfasis en la población con enfoque de género afectada por la violencia.
En cuanto a la medida de restitución, desde la territorial Cesar – La Guajira, se comentó que el Sujeto de Reparación, se formó en procesos de economía solidaria y recibió un banco de maquinaria agrícola, que incluyó entre otros, un tractor, un arado, una rastra preparadora, una encaladora y una voleadora.
Durante el proceso, también se dispuso de apoyo educativo con un salón de clases y mobiliario, en el que sobresale una biblioteca para 40 personas, un laboratorio, computadores y escritorios.
Quienes hacen parte de la comunidad Chimila también se favorecieron con capacitación y fomento del empleo rural, así como fortalecimiento financiero y empresarial.
Por su parte, la Fiscalía General, también apoyó a las víctimas de esa región, brindándoles medidas de prevención para los grupos expuestos a mayor riesgo como mujeres, niños, niñas, adolescentes, líderes sociales y víctimas de desplazamiento forzado, entre otros.