Caterine Ibargüen hizo vibrar a Barranquilla con su primer oro
Ganó en el salto largo y ahora se alista para competir en el salto triple.
Con la bandera de Colombia, Caterine Ibargüen agradeció al público el apoyo tras ganar la prueba de salto largo.
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Guillermo González / EL TIEMPO
El estadio Rafael Cotes se quería caer. El público se emocionó con los seis brincos de Caterine Ibargüen en al salto largo. Cuando el anunciador oficial dio por terminada la competencia en los Juegos Centroamericanos y del Caribe y con voz fuerte cantó el oro de la atleta colombiana con una marca de 6, 83 metros, la gente enloqueció.
De una vez sonó la música del Joe Arroyo. Ella levantó los brazos, y le ofreció la medalla a la gente que la apoyó desde que llegó a Barranquilla, y el público comenzó a corear su nombre. La larga cabellera de Caterine ondeaba, la brisa era fuerte, tan fuerte como sus pasos hacia la tabla de batida, en la que solo falló una posición, en el quinto salto, el que fue nulo. De resto, casi todo perfecto, así como lo hace siempre. Ibargüen cogió el micrófono y se dirigió a la gente, que, sin importar los 35 grados de temperatura y la alta humedad, no se movió del escenario hasta que la estrella hablara.
“¡Gracias, Barranquilla! Esta medalla es para ustedes, para mi país. Los espero el miércoles, para que me acompañen en el salto triple”, dijo una Ibargüen feliz, que ajustó su primer oro en el salto largo y el segundo en la historia de los Juegos, tras el título de hace cuatro años en el salto triple.
Se fue al camerino, se evadió. Ibargüen no se volvió a ver en el estadio, pero la gente siguió gritando su nombre. No les importaba sino ella, el segundo lugar de Cantel Malone (Islas Vírgenes) pasó a un segundo plano y ni se diga el bronce de Félix Boyer (Puerto Rico), quienes con 6,52 m y 6,45 m, respectivamente, fueron plata y bronce, y no fueron problemas para Caterine.
Con el oro de la colombiana, la delegación nacional llegó a 54, pero Cuba le pisaba los talones, porque sus atletas repuntaron y alcanzaron los 53 oros. México seguía imparable, pasó la barrera de los 100 oros y cerraba la jornada con 103.
En el primer deporte, Daniel Pineda, Daniel Betancur y Andrés Pila ganaron la competencia del equipo masculino arco recurvo en la arquería. En un emocionante enfrentamiento los colombianos lograron la victoria 5-3 luego de jugar cuatro períodos, donde la iniciativa primero la tuvieron los visitantes. Esta es una medalla que pone a soñar, pues hace poco en Cochabamba el equipo también se colgó el oro de los Juegos Suramericanos y va por muy buen camino en el ciclo olímpico.
Carolina Castillo se convirtió en la primera atleta nacional en la lucha en darle a la delegación nacional una medalla de oro en esta edición de las justa. Lo hizo en la categoría de los 50 kilos, tras derrotar en la final a la mexicana Mariana Díaz. Castillo fue bronce en los Juegos Bolivarianos y en los Juegos Suramericanos alcanzó el título.
“Vine a eso, a ganar. Me da alegría saber que en los Centroamericanos pude sostener el oro que logré en los Suramericanos”, dijo Castillo.
Nicolás Mejía y Eduardo Struvay obtuvieron el título en la competencia de dobles masculinos de tenis. Más tarde, Struvay, con María Pérez, ganó en el torneo de dobles mixtos del ‘deporte blanco’. Tomado de ElTIEMPO
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